Mantenimiento de tus baterías solares
Los componentes de una instalación solar doméstica requieren un mantenimiento, aunque no todos necesitan el mismo tipo de tratamiento. Cada dispositivo tiene unos tiempos de revisión y deben recibir un tipo distinto de mantenimiento. En el caso de las baterías, estas también han de revisarse cada cierto tiempo y someterse a varias acciones para evitar que se pierda rendimiento y si ocurre esto, recuperar toda la efectividad necesaria para que vuelva a ser útil y eficiente.
Hay distintos tipos de batería, así que cada una de ellas necesita un tipo distintos de mantenimiento. Las más comunes, llamadas Monoblock o también las baterías de vasos OPZS y TOPZS, necesitan que se llenen estos de agua destilada. La acción de la batería provoca que esta se evapore y su nivel vaya bajando poco a poco. Si no se revisa este nivel, las baterías pueden sufrir daños graves y perder eficiencia, bajando su rendimiento y llegando a causar su rotura definitiva.
Las baterías solares necesitan mantenimiento, aunque sea mínimo
Este tipo de baterías suelen llevar un indicador de nivel que permite saber si tiene suficiente agua destilada para funcionar correctamente o si precisan que se rellenen los compartimentos de la misma. Con un nivel de líquido óptimo, no debería existir ningún problema para que la batería funcione a pleno rendimiento y nos ofrezca el rendimiento que se espera de ella. Es importante realizar un control visual del equipo completo cada poco tiempo. Con esta revisión no solo se puede comprobar si el nivel del agua es el correcto, sino que además se puede ver si hay algún desgaste o rotura en los complementos de la instalación, tales como las conexiones, los cables o cualquier otra cosa que pueda provocar una avería.
La temperatura del lugar dónde se almacenan las baterías es importante también. Lo ideal es que la temperatura de la estancia se mantenga en unos 20º, ya que si se baja de esta temperatura la eficiencia va disminuyendo gradualmente. A temperaturas más altas la evaporación del agua es mayor, por lo que necesita un mantenimiento más continúo. Si no se puede realizar un mantenimiento periódico, por la ubicación de la instalación o cualquier otro motivo, existen baterías que no requieren mantenimiento y que podrían resultar más adecuadas.
Eso sí, aunque ese mantenimiento no sea necesario, nunca está de más realizar un control cada cierto tiempo. Aunque la batería permanezca inalterada, pueden existir causas externas que provoquen una pérdida de eficiencia y rendimiento, por lo que no está de más realizar ese control rutinario. Y, ante cualquier problema detectado, recuerde que puede ponerse en contacto con los técnicos de REBACAS, que solucionarán cualquier problema en el menor tiempo posible.